El pasado mes de agosto comimos en familia en casa de mi hermano Pablo y nos preparó 4 kilos de almejas de carril. A mi hermano mayor le gusta mucho la gastronomía y cocina estupendamente.
Tengo que reconocer que han sido las almejas a la marinera más sabrosas que he degustado en mi vida y las excelentes almejas que disfrutamos en Carril, en el mes de septiembre del 2010 con nuestros amigos Pili y Ramón, ocupan en este momento, la segunda posición.
Es una pena que la fotografía no tenga una resolución excelente porque la sacamos con un móvil pero las almejas estaban para chuparse los dedos y no parar de mojar en la deliciosa salsa una y otra vez.
Le pedí a mi hermano que me aportara la receta y hoy quiero compartirla con vosotros con la finalidad de que podáis disfrutar de un delicioso plato de nuestra cocina tradicional.
Ingredientes para 2 kilos de almejas de Carril:

3 ó 4 cebollas.
4 dientes de ajos.
Una cucharada de tomate frito o algo más sólo para darle un poco de color. A veces le echo kétchup.
Una cucharadita de pimentón.
Harina para espesar la salsa.
Un buen ramo de perejil.

Preparación:

1º.- Abrir las almejas en una sartén con un vaso de agua y a medida que se van abriendo las vamos colocando en una tartera. Colamos el caldo y lo reservamos para la salsa.

2º.- Freír bien la cebolla con los ajos bien picaditos y sin que se quemen. Cuando la cebolla está bien pochada a punto de coger un poco de color, añadir la harina, la cucharada de tomate y el pimentón e ir haciendo la salsa con el agua de cocción de las almejas. Si queremos, podemos hacer un poco más de salsa añadiendo fumé de pescado.

3º.- Cuando añadas harina todo va en función de como os guste el espesor de la salsa. A mí me gusta un poco espesita.

4º.-Para finalizar, incorporamos la salsa sobre las almejas, el perejil muy picadito y las mantenemos a fuego lento durante 3 ó 5 minutos nada más sino se endurecerán.

Nota: Pablo me ha dicho que lo ideal es que los comensales estén sentados en la mesa para servir inmediatamente las almejas una vez estén en su justo punto de textura y sabor.