Cuando observé los ilustrativos pasos de la preparación de este exquisito guiso de coliflor con níscalos en la cocina virtual de mi querido compañero de fogones Carlos Dube de Mercado Calabajío sabía que me iba a encantar y no lo pensé dos veces. Esa misma tarde, salí de mi casa magnis itineribus a comprar una hermosa coliflor de mi tierra -el plato lo merece- y tuve la fortuna de encontrarla, yo creo que me estaba esperando para ser acompañada en mis fogones con unas sabrosas setas de temporada que este otoño generoso me había obsequiado.
Carlos Dube nos recomienda en su receta que degustéis este exquisito plato al día siguiente y yo estoy totalmente de acuerdo con él.
Me encanta la coliflor cocinada de varias formas y sobre todo con bacalao pero es que este plato me ha sorprendido gratamente. Reconozco que es un plato laborioso pero a las personas a quienes nos gusta la gastronomía disfrutamos con los retos y sabemos muy bien que para comprobar la calidad de un plato de cocina hay que introducir las manos en la masa, equivocarnos, rectificar y consolidar. Salvo con los piñones que casi se me tuestan en exceso, he sorprendido a mi familia con un plato rico, rico de verdad especialmente a tía Fina que comentaba: -«Esta coliflor esta delicada,delicada, muy suave de sabor, está exquisita».
Me encanta cocinar las recetas de mis compañeras y compañeros blogueros cocineros, no creo que por esta sana y saludable afición se me deba considerar un «bicho raro» así que yo os animo a compartir y a disfrutar de la gastronomía porque para un bloguero cocinero, para un amateur de los fogones como yo o para un cocinero profesional no puede haber mayor satisfacción personal que las personas reconozcan la calidad de sus platos y sobre todo lo rico, rico, rico que están cuando alcanzamos con éxito el resultado final deseado.
Podéis decorar el plato con un huevo cocido cortado en rodajas.

Ingredientes:

1 hermosa coliflor de mi tierra.
600 gramos de Lactarius deliciosus o Lactarius sanguifluus.
2 cebollas.
1 litro de caldo de carne de ternera gallega y hortalizas (2 zanahorias y un hermoso puerro).
20 gramos de piñones.
3 dientes de ajo rojo.
Harina para rebozar.
Perejil.
3 ó 4 huevos.
Pimienta negra.
Sal.
Aceite de oliva virgen extra.

 Una hermosa coliflor de mi tierra me estaba esperando
 Preparación:
1º.- Cocinamos a fuego medio-6 en vitro- durante una hora un sabroso caldo de carne de ternera gallega con las zanahorias, el puerro, un poquito de sal y un chorrito de aceite de oliva virgen extra y posteriormente lo colamos y reservamos.
2º.-Troceamos la coliflor con un cuchillo en trocitos no demasiado pequeños y reservamos.

 3º.-Picamos los tres dientes de ajo, abundante perejil y reservamos.

4º.-Picamos las dos cebollas en brunoise y comenzamos a pocharla a fuego lento en un poquito de aceite de oliva virgen extra y añadimos una piza de sal.
5º.-Mientras pochamos la cebolla a fuego lentro-3 ó 4 en vitro-, cocemos en agua fría los trocitos de coliflor durante unos 12 minutos probando de vez en cuando su textura hasta comprobar que está al dente. Recomiendo que lo hagáis así sino la coliflor puede pasarse de punto y quedar muy blandita, demasiado blandita.
 6º.-Escurrimos muy bien los trocitos de coliflor dado que es muy importante a la hora de rebozarla y freírla posteriormente.
7º.-Nuestras cebollas ya están casi en su punto ideal de pochado así que les incorporamos los níscalos que previamente hemos limpiado sin prisa alguna con un paño húmedo asegurándonos muy bien de que no se nos cuele ninguna arenilla. Salteamos nuestros ingredientes durante un par de minutos más añadiendo pimienta negra recién molida y un poquito más de sal.
8º.- Incorporamos los ajos y el perejil bien picaditos y rehogamos nuestros ingredientes durante unos tres minutos más.
 9º.-Incorporamos un generoso vaso de caldo de carne y verduras y cocemos a fuego lento los níscalos durante unos 10 minutos.
 10º.-Rebozamos en harina y huevos caseros batidos los trocitos de coliflor y los freímos a fuego medio-6 en vitro- hasta que adquieran el bonito color que podéis apreciar en estas fotografías.
 11º.-Situamos la coliflor sobre papel absorbente de cocina. Os apetecerá degustarla pero tendréis que aguantaros ;-( sino no llegaréis a disfrutar del resultado final este exquisito plato de nuestra cocina tradicional.
 Yo no pude resistir a la tentación y degusté uno, dos, tres trocitos….
12º.-Tostamos a fuego medio los piñones en una sartén, les añadimos un poquito de caldo, batimos bien con la batidora y reservamos. Cuidadín con el tostado de los piñones dado que es muy fácil que se os quemen si no estáis atentos queridos amigos. Casi me los cargo por estar distraído así que quien avisa no es traidor; ¿no? ;-).
 13º.– Incorporamos la picada de los piñones a los níscalos y posteriormente con cuidado los trocitos de coliflor, añadimos un poquito más de sal y caldo suficiente hasta cubrir nuestros ingredientes.
14º.-Dejaremos cociendo nuestros ingredientes durante unos diez minutos más a fuego lento teniendo en cuenta que este tipo de cazuelas continuarán manteniendo el calor durante varios minutos más y la coliflor podría cocerse en exceso. Lo ideal es que la coliflor quedase tierna pero no con la textura que tendría la miga de pan mojada en leche ;-(.…..
15º.-Es un plato exquisito, os sorprenderá gratamente y sobre todo a aquellas personas a quienes la coliflor les resulta potente de sabor dado que con la acertada combinación de las setas, el delicioso sabor final os hará caer en la tentación de repetir una o dos veces más este plato si es que sobra claro está.
Apreciado Carlos, muchas gracias por compartir a través de tu rica y saludable cocina un plato tan exquisito como el que vuestras mercedes pueden observar en la fotografía superior, un plato que he cocinado con mucho cariño para compartirlo con mi familia.
Os deseo un feliz fin de semana que ya está llamando a las puertas, y me despido de vosotros hasta la próxima con una copa de buen vino en mi mano brindando por vuestra salud y felicidad y con el corazón alegre porque la encantadora música de mi compositor favorito W.A. Mozart está conmigo en estos gratos momentos compartidos.