Sí, ya sé que aún no ha llegado el verano -qué más quisiera un servidor- pero esta rica ensalada de naranjas de la variedad Navelate y bacalao se la dedico a las buenas gentes de la mar para que no pierdan la esperanza de que el sol volverá a lucir pronto por nuestras costas, a Marisa de Naranjas Marisa porque su empresa familiar es un modelo de buenas prácticas y a mi apreciado paisano, maestro gastronómico y Chef Alfonso Alfonso Diaz Martinez por sus consejos para preparar esta deliciosa ensalada que le ha gustado hasta nuestra querida amiga Pili Pili Porto a quien no le gusta nada el bacalao.
Os confieso con toda franqueza que desde hace mucho tiempo tenía muchas ganas de preparar esta sabrosa ensalada en mi casa pero nunca habría imaginado que mi esposa María la emplataría para compartirla en familia con nuestros amigos en este duro invierno aderezado de ciclogénesis.
Una ensalada refrescante, exquisita y muy saludable para degustar y compartir como entrante en primavera, verano, otoño e invierno.

No he seguido al pie de la letra las generosas recomendaciones del maestro gastronómico Alfonso Diaz Martinez y he optado en esta ocasión por confitar previamente en aceite de oliva virgen extra este excelente lomo de bacalao de las Islas Feroe a 55º C durante unos 4 minutos dado que aún estamos en invierno, jajajaja. Tampoco le he añadido huevo cocido a la ensalada y tampoco he podido aderezarla – a pesar de mis pesares- con el aceite de oliva virgen extra Aires de Jaén Selección especial. 
Te prometo Alfonso que cuando tenga una oportunidad así lo haré y lo compartiré .
Ingredientes para dos personas:
180 gramos de lomos de bacalao de las Islas Feroe.
3 naranjas de la variedad Navelate.
1 cebolleta.
4 dientes de ajo rojo.
Aceitunas negras y alcaparras a vuestro gusto.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal en escamas. 
 
Preparación:
1º.- Cortamos una generosa sección de un excelente lomo de bacalao que compré en el ultramarinos «El Mundo» en A Coruña y lo confitamos en aceite de oliva virgen extra – aceite previamente enriquecido con 4 dientes de ajo rojo que hemos machacado y mantenido en el aceite durante al menos 30 minutos- a una temperatura de unos 55º C durante 4 ó 5 minutos.
El bacalao podemos cortarlo para emplatar en pequeñas secciones crudo pero dado que a nuestra amiga Pili no le gustaba el bacalao opté por confitarlo previamente un poquito y la verdad es que estaba de muerte relenta.
 
Aviso a navegantes, el buen bacalao no es un producto barato en estos tiempos- no así en otros felices tiempos como todos los de mi quinta ya sabéis- dado que en estos momentos, el precio de los lomos de bacalao desalado sin espinas de las Islas Feroe envasados al vacío cuesta 23 euros el kilo.
De todas formas, yo creo que los buenos amigos, los amigos de verdad se merecen no sólo un excelente bacalao sino muchas cosas más aderezadas de nuestro afecto.
2º.- Mondamos las excelentes naranjas navelate con un cuchillo muy bien afilado y extraemos sólo los gajos uno a uno sin nada de piel, gajos que nos aportarán una textura carnosa y jugosa y un delicioso y dulce sabor que maridará muy bien con el punto de sal perfecto de este excelente bacalao desalado.
3º.- Cortamos la cebolleta en juliana o a vuestro gusto, las aceitunas negras en rodajas y reservamos nuestros ingredientes en un plato con los gajos de naranja y las alcaparras a nuestro gusto.
4º.- Para finalizar, María ha emplatado esta sencilla, exquisita y saludable ensalada como podéis observar en la fotografía superior rociando generosamente con aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal en escamas.
Confío y deseo que con esta rica ensalada de bacalao y naranjas, el mar se vaya calmando poco a poco y las ciclogénesis vayan haciendo el relevo a la próxima primavera que ya está a las puertas atendiendo a las evidencias que nos está aportando y compartiendo nuestra generosa, bella y siempre invencible naturaleza.
Confío y deseo que así sea amigos, os deseo con este post o entrada en mi cocina desde La Ciudad de Cristal un feliz fin de semana y una nueva y feliz semana donde el sol se muestre un poquito más generoso con las buenas gentes de esta noble y hermosa tierra gallega.