Jurelas al horno sobre cama de patatas panadera.
¡Qué rico, económico y saludable es el pescado azul compañeros!, no me cansaré de repetirlo y ¡qué ricas son las jurelas!. Recuerdo con mucho cariño cuando en cierta ocasión había cocinado en casa de mis suegros dos hermosos ejemplares de jurelas de dos formas diferentes – una de ellas con una sabrosa salsa de almendras tostadas- dado que a mi querido suegro Julio le encantaba este sabroso pescado.
Siempre que hago referencia implícita o explícita en mi blog a mi mejor amigo me emociono así que prefiero entrar sin más dilación en la preparación de este plato rico de nuestra querida cocina tradicional, plato sencillo que os recomiendo con afecto desde estas queridas y embravecidas costas del Atlántico.
2 jurelas medianas (500 gramos cada una).
2 pimientos verdes italianos.
2 cebollas rojas.
2 dientes de ajo rojo.
Tomates Cherry.
1 kilo de patatas de Coristanco.
1/2 vaso de vino Albariño.
Caldo de pescado.
Aceite de oliva virgen extra.
Sal.
Preparación:
1.- Troceamos las cebollas en juliana y las pochamos ligeramente en un poco de aceite de oliva virgen extra con una pizca de sal fina. Incorporamos los ajos previamente machacados con la palma de la mano cuando la cebolla comience a dorarse ligeramente, salteamos durante unos tres minutos más. Incorporamos los pimientos verdes cortados en rodajas o en tiras, un poquito de sal y continuamos pochando a fuego lento durante unos 5 minutos más.
2.- Cortamos las patatas en rodajas de unos 3 mm y las doramos ligeramente en nuestra freidora. Una parte importante de las patatas fritas las mezclamos con nuestro sofrito de hortalizas, el vino Albariño y una pizca de sal formando una cama de patatas panadera sobre la que hemos situado las jurelas a la espalda rociándolas con un poquito de A.O.V.E. El resto de las patatas fritas las situamos a nuestro gusto alrededor de la fuente. De esta forma, al final del asado de este sabroso, económico y saludable pescado azul disfrutaremos de dos texturas con nuestras patatas, tiernas, doradas, crujientes y exquisitas.
3.- Cortamos los tomates Cherry a la mitad y los distribuimos a nuestro gusto sobre la fuente y añadimos un poquito de caldo de pescado. En mi caso, he utilizado una vez más caldo corto que tenía congelado de una cabeza de merluza cocida con puerro, zanahoria, cebolla, perejil y sal.
4.- Precalentamos el horno a 200º C con función horno convencional y situamos la fuente en una posición intermedia con calor arriba y abajo reduciendo la temperatura a 170º C y manteniendo las jurelas durante unos 20 minutos. Transcurrido el tiempo, comprobamos con unas pinzas que las espinas centrales de las jurelas se desprenden con facilidad.
Vale más una imagen que mil palabras compañeros:
Es verdad que mañana aún es jueves pero de todas formas, os deseo desde A Coruña un feliz San viernes y un feliz fin de semana con afecto queridos mortales.
La cocina nos une, procede compartir nuestros fogones con familiares y amigos porque la comida también nos une.
Dedico este plato con especial cariño a mi querido suegro Julio y a todas las buenas gentes de la mar.
No he probado nunca las jurelas. ¿A que pescado se podría parecer? ¿A las caballas quizá?
Saludos